LA “U”, UN “RETAIL”?

Sorprende el tenor de la crónica publicada este martes por el diario La Tercera, en lo que dice relación con lo que sería una decisión del directorio de la concesionaria que rige los destinos de la “U” como club deportivo, al adjudicarle la política de conformar un equipo de jugadores “vendibles” como estrategia para proceder a rejuvenecer el plantel y paralelamente obtener réditos económicos tras la venta de los derechos de aquellas figuras jóvenes.

Llama la atención que la primera medida a poner en práctica no sea necesariamente detener el actual tren de renovaciones de contratos a jugadores que no son precisamente jóvenes, muchos de ellos que ya completaron largamente un ciclo en el equipo o simplemente no llegaron ni llegarán jamás a ser ‘vendibles’, y hacerlo por períodos bastante extendidos en la mayoría de los casos. (Ejs.: Gustavo Lorenzetti, Leandro Benegas).

Salta a la vista además que no haya una visión más amplia y se hable de ‘jugadores jóvenes’ o ‘de la cantera’ como si el club fuese un productor permanente de figuras capaces de asumir responsabilidades en el primer equipo. Con quererlo y expresarlo ciertamente no es suficiente. Menos si los poquitos que son promovidos de tarde en tarde tienen pocas opciones de jugar y cuando lo hacen demuestran no estar completamente terminados como jugadores para desafíos de club grande. ¿Lo peor..?, que muchos aquellos que parecieran estarlo o en vías de serlo, son prematuramente enviados a préstamo a clubes donde juegan tarde mal y nunca y tras lo cual no tienen suficiente vitrina para esperar venta alguna. Raramente esos jugadores son recuperados para integrarse a un plantel donde la exposición podría ser muchísimo más notoria y su madurez profesional concretarse bastante antes. ( Ej.: Nicolás Ramírez)

Si la política de formación de jugadores ‘propios’ es la misma de siempre – la actual – pensar ilusoriamente en que se pueda tener un alto porcentaje de formados en casa para competir y luego vender, es una aberración estratégica que deja en evidencia lo que es entender muy poco de este tema: Si formas 2 a 3 jugadores que destaquen en el primer equipo y rápidamente aparecen los representantes con contratos en clubes casi desconocidos de México, el plantel se vuelve a quedar rápidamente sin figuras y te obliga a contratar a jugadores de mayor edad que son los que finalmente terminan jugando siempre, tapando la aparición de nuevos talentos. A buena parte por lo tanto tu política de renovación…

¿Cuál debiera ser la solución? Claramente no como se ha planteado. Se debe pensar más bien en traer jugadores que reemplacen a los que ya dieron cuanto tenían, pero que sean pocos y verdaderos especialistas en los puestos clave (no proyectos provenientes de equipos chicos) para que los jóvenes proyectados al equipo de honor, jugando y entrenando a su lado, crezcan y maduren mucho más rápido y completamente. Para eso, quien tenga esa responsabilidad ejecutiva debe ser alguien que conozca mucho del medio futbolístico, que sea un estudioso permanente del mercado de figuras emergentes en clubes de alta exigencia antes que en clubes menores de nuestra competencia o extranjeros que tienen apenas una o dos temporadas relativamente buenas en Chile, que tenga buenos contactos y, sobre todo, ascendencia sobre referentes de otras latitudes. Que haya estado en otras realidades como profesional y que no vea esto prioritariamente como un negocio o para satisfacer gustos propios.

En palabras simples, la idea no parece tan alocada, pero parece insuficiente para lo que verdaderamente hace falta. Si la pretensión de tener jugadores ‘vendibles’ es real, no debe ir alejada de la necesidad de cambiar primero la política formativa, de establecer una fórmula que asegure mayor participación de quienes sean promovidos al primer equipo, y sobre todo y especialmente, que a cargo de dirigirla esté alguien que verdaderamente trabaje por conseguir sólo 2 cosas: que el primer equipo tenga muy buena evaluación tanto en su forma de juego como en sus resultados por períodos constantes de tiempo (de otra manera los jóvenes no lucen y no hay ofertas por ellos) y que se tenga la suficiente paciencia para retener a esas figuras jóvenes por mayor cantidad de tiempo para que su valor de venta supere los pobre números con los que salen actualmente los pocos que son vendidos.

En el retail, el tema es diferente porque usted puede ir a China u otros mercados a buscar mercadería de liquidación para hacer caja rápido varias veces en el año, vendiendo productos de valor y calidad inferior. En un club deportivo serio y grande como pretendemos que siempre sea la “U”, no aplican esas mismas líneas de acción. Y es por eso justamente que tenemos un plantel envejecido.

#VamosAzules

Por Jaime Aguirre Dueñas. @jaimeagUirred, para www.100x100azules.cl y @Cienx100Azules